Análisis de la situación

Antes del siglo XVIII, las personas trataban principalmente las heridas basándose en las experiencias personales. A fines del siglo XVIII, se aplicó el concepto de curación en seco de la terapia de exposición o una capa delgada de vendaje transpirable para tratar las heridas. En la década de 1960, la teoría de la curación húmeda comenzó a estudiarse gradualmente y se demostraron el avance y la eficacia de esta curación con una gran cantidad de tipos de heridas y la práctica clínica.
Con el progreso de la ciencia y la tecnología y la actualización continua de los métodos de cuidado de heridas, los trabajadores de enfermería clínica deben dominar los nuevos conocimientos y habilidades de cuidado de heridas, y adoptar métodos de apósito y apósitos adecuados de acuerdo con las diferentes condiciones de los pacientes, brindando a los pacientes mejores servicios de enfermería. La curación húmeda en el proceso de tratamiento clínico no solo puede ayudar a que la herida sane temprano, sino que también reducir la cantidad de cambios de apósito para los pacientes, mejorar la comodidad de los pacientes, acortar significativamente la estadía del paciente en el hospital y esforzarse por lograr una recuperación temprana.